Si solo de pensar en esos anuncios invasivos que parecen seguirte a todas partes te entran ganas de salir corriendo, relájate. Porque hoy venimos a hablar de cómo los social media ads son todo lo contrario al terror publicitario. Imagina un mundo donde los anuncios no solo te conocen, sino que parecen leer tu mente (sin necesidad de una bola de cristal). Olvídate de las ofertas que ni sabías que necesitabas; estos anuncios son como ese amigo que, en lugar de regalarte calcetines, sabe exactamente qué quieres antes de que tú lo sepas. Prepárate para ver cómo los social media ads convierten el caos de tu feed en una experiencia personalizada y, sorprendentemente, mucho menos molesta.

¿Qué son los social media ads?

Empecemos por lo básico. ¿Qué son los social media ads? Pues bien, los social media ads son esos anuncios que ves mientras deslizas sin cesar por tus redes sociales favoritas. Aparecen en tu feed de TikTok, en tus historias de Instagram y hasta entre los BeReal de tus amigos -app de la que somos muy fans en Oh la là!-. Básicamente, los social media ads son la versión moderna de esos carteles de toda la vida, pero mucho más sofisticados. Son anuncios dirigidos, personalizados y creados específicamente para captar tu atención mientras haces una de las cosas que más nos gustan: scrollear y pasar tiempo en las redes sociales.

¿Por qué invertir en publicidad en redes sociales?

Ahora que ya sabes qué son los social media ads, vamos a ponernos serios por un momento. O no tanto. Imagina que viajamos en una máquina del tiempo a la época en que la publicidad consistía en pegar un cartel en una pared y esperar a que alguien lo viera. Pero, seamos sinceros, ¿quién tiene tiempo para eso hoy en día? Estamos en una era en la que nuestra capacidad de concentración es menor que la de un pez y nuestra paciencia, más parecida a la de un niño en una tienda de dulces. Entran en escena las redes sociales, el universo donde todos estamos enganchados a nuestras pantallas, deslizando el dedo como si estuviéramos en una maratón olímpica. Así que, si quieres que tu mensaje no se pierda entre la avalancha de memes y gatos adorables, es hora de invertir en social media ads. Porque, admitámoslo, tu cartel en la pared no va a competir con un video de un perro con gafas de sol.

1. Tu audiencia está allí, y mucho más allá

Sí, todos están en redes sociales. Hasta tu gato probablemente tiene más seguidores en Instagram que tú. Por eso, si quieres que tu producto o servicio llegue a los ojos de la gente (y sus mascotas), ahí es donde tienes que estar. Olvídate de esos tiempos en los que solo los adolescentes usaban Instagram. Ahora, hasta tu jefe tiene una cuenta para presumir de sus habilidades culinarias.

2. Más barato que esa compra impulsiva que no necesitabas (y mucho más efectivo)

¿Alguna vez has salido a comprar “solo lo necesario” y terminas con algo que ni sabías que existía, pero que definitivamente necesitabas? Bueno, lanzar una campaña en redes sociales es más barato que ese antojo impulsivo y, al contrario que esa vela con aroma a “bosque encantado”, así sí conseguirás que tu campaña tenga un impacto real. Mientras ese capricho te da satisfacción un par de minutos, una buena estrategia publicitaria te dará resultados que duran mucho más (y sin llenar de cosas raras tu carrito de la compra).

3. Segmentación nivel stalker

Las redes sociales son como ese amigo curioso que siempre está al tanto de todo. Saben qué te gusta, qué te molesta y cuántas veces al día buscas vídeos de gatitos “solo cinco minutos”. Pero ¿sabes qué? Para los anunciantes, esto es una mina de oro. Puedes dirigir tus anuncios exactamente a quienes les interesan. ¿Vendes mantas con mangas para esos días de sofá y maratones de series? Perfecto, puedes asegurarte de que tus anuncios solo lleguen a los auténticos profesionales del «hoy no me muevo de aquí». Porque, seamos sinceros, ¿quién necesita invertir en gente que prefiere salir a correr un domingo?

4. Mide todo, desde los me gusta hasta los suspiros

¿Te acuerdas de cuando la publicidad era un acto de fe? Lanzabas una campaña y solo te quedaba rezar para que funcionara. Bueno, bienvenido al futuro, donde puedes medirlo absolutamente todo. ¿Cuántas personas hicieron clic? ¿Cuántas lo vieron y siguieron deslizando con la misma emoción con la que ignoras el despertador cada mañana? ¡Hasta puedes saber cuántos suspiros de aburrimiento causó tu anuncio! Y lo mejor de todo: si algo no está funcionando, puedes cambiarlo en tiempo real, como si fueras el DJ de tu propia fiesta publicitaria. Porque sí, ahora controlar el éxito de tu campaña es tan fácil como cambiar de playlist en Spotify.

Lo que realmente importa al final

Pero ¿funciona realmente? ¡Claro que sí! Si todavía no te convence, mira a tu alrededor. Las marcas que triunfan están en redes sociales. ¿Por qué? Porque ahí es donde está la gente. Las redes sociales no son solo un lugar para compartir fotos de tus vacaciones o debatir sobre si la piña pertenece a la pizza (alerta de spoiler: no, no pertenece), sino que son un campo de batalla para la atención del consumidor.

Como ves, la publicidad en redes sociales no es solo una moda pasajera, es la herramienta del momento que está aquí para quedarse. Tanto que se ha convertido en la estrella del marketing digital, y estar al tanto de sus novedades es casi tan esencial como tu café matutino. Pero no te preocupes si el mundo de los social media ads te parece un torbellino de tendencias y métricas. Desde Oh la là! Comunicació, te mantendremos informado sobre esta y otras maravillas del marketing digital a través de este blog. Y si quieres estar siempre al día sin perderte ni un detalle (ni uno solo), puedes suscribirte a nuestra cápsula a través del footer de nuestra web.